Entre sus labios el mercurio se amotina y la fría densidad desvive en colapsos. Entre sus ojos la lisina merma y el brillo se esconde tras plásticos que sangre precipitan. Entre sus manos mis dedos y entre mis dedos izquierdos su cabello. Entre sus oídos el diagnóstico se atendió definitivo y el sollozo comprendió la despedida. Aquí entre nosotros, sonrío y le vi partir sin remedio.
Ejercicios y experimentos de escritura para leer en voz alta a una can-hija aficionada al streaming, los contenidos y la tuiteratura.