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Entradas

Colaboración

Publicado originalmente en: https://kreativ-arte.com/#!/blog/pouring/2/p/     Un amigo inicio un negocio de venta de arte y como no sabía como iniciar un blog para su sitio me pidió ayuda. Como buen webmaster investigue de que se trataba su concepto y la técnica pouring de verter pintura acrílica de forma metódica pero con inspiración caótica me pareció fascinante. Así pues escribí un poema inspirado en uno de sus cuadros. BUSCAR | Poema La mirada gira al fondo de un caleidoscopio, en el vértice del destello se pueden observar maremotos. Pasos amarillos viajan a ocres sobre arenas radiales, dónde el índigo transcurre viendo el anochecer en estrellas rosadas. Soy viajero estático en busca de su destino rojo, territorio lunar del tono más bello y turquesa.  
Entradas recientes

Samantha

De inicio serpenteante, silencioso escapar de los labios que deben pronunciar susurrantes SSSeptiembre desigual inspiración silente de mi nombrar semblantes. Creciente suspiro por imaginar nombres y nombramientos No, sólo deseo un nombre singular para acelerar la brevedad, la breve edad del sujeto bifurcado que soy. Ausente de sustantivo despierto con un rompecabezas entre manos, y de mis labios ha escapado, m i   n o m b r e al aire y sus oídos. https://whvn.cc/7331j3

Deletrear

Las letras me persiguen como minúsculos canes: no basta golpearles para ganar distancia. Me asechan pero carezco de voz para nutrirles. Saturo con tinta su interior y las veo concluir en vocablos ingratos que amenazas mis espaldas. Me obligan a deletrear hasta balbucir sus nombres y saldar sus afectos, lamen el dorso de mis manos con esas fauces que prefieren mis gritos a mi caligrafía. URL de Imagen: https://whvn.cc/478590

Enter the Dragon

Y despierto con la soledad encallada entre las piernas y como una inesperada sorpresa leo tus palabras abundantes y contundentes como deben ser tus labios. Mi sexo punza exigiendo las caricias de la mañana y ahí estoy penetrada por tu escritura buscando el punto G de gemir tu nombre, el cual desconozco pero imagino medieval y poderoso. Y estamos en el campo de batalla asido uno de otro, cubiertos en sangre enemiga y con las armaduras hechas añicos por las embestidas del odio y la guerra autoimpuesta. Hemos peleado con dragones de otros mundos y ahora estamos solos, heridos y desnudos. Busco tus labios, tu aliento y tu lengua para disipar el dolor con tu saliva. La derrota nos derriba sobre el lodo rojo y las viseras de nuestras víctimas. Y entras en mí con la fuerza de una horda, tu sexo me invade y arremete con el afán de pulverizarnos y ser uno en el polvo y las cenizas. Mi sexo arde cual forja donde el metal más resistente se funde y sobre mí empiezas a gruñir como una insaciable b

Incidir

Cuerpo es asunto del cuerpo, la precisión del cuerpo siendo densidad, con su consistencia de cuerpo sonámbulo, cuerpo arraigado en el espesor. Corporalidad expuesta a la cicatriz quirúrgica, a la herida de piel profunda que no permitirá sanar, cuerpo asido a la enfermedad. Un cuerpo de piernas y brazos indiferentes, de conyunturas sordas al transcurrir hinchado de un suero potasio. Los latidos de mi cuerpo, suspendido en sangre gruesa, preguntan en voz corporal: ¿Qué tiempo? ¿Qué cuerpo? le resta a mi cuerpo.

Narración en primera persona

Narración en primera persona – #Escritura2018 7/52 Por Samantha Bañuelos R. | StevieVelvetDog   Recorrí durante horas varios kilómetros de red neuronal en busca de un recuerdo. Quisiera poder decir que mi memoria es como una biblioteca bien catalogada, pero la verdad, se asemeja más a un calabozo. Millones de puertas se presentan ante mi custodiando recuerdos, nociones e ideas tras de sí. Lo único identificable de lo que pudiera contener cada espacio confinado es la consistencia de cada puerta. Las que proyectan translúcido código binario son gajes del oficio. Las que son de carne viva con heridas recién cosidas son asuntos de salud e intrínseca biología. Pero no olvidemos que estoy buscando un recuerdo, de infancia para ser exacta, así que no tengo más opción que ir a lo más profundo de mi ideático calabozo. ¿Dónde podré encontrar un recuerdo medianamente feliz del que pueda escribir? ¿Qué tipo de recuerdo me gustaría encontrar? De todos los pisos que hasta hoy conforman

Recuerdo de la infancia

Recuerdo de la infancia – #Escritura2018 6/52 Por Samantha Bañuelos R. | StevieVelvetDog Qué difícil es elegir un recuerdo, en especial uno de los que pertenece a la infancia, quizás porque al mirarlos de nueva cuenta como un adulto no todos son tan felices ni las tristes como recordamos. Leemos nuestra propia memoria como los adultos que somos, y tal vez debamos mirar como los niños que fuimos. Mi recuerdo es una curiosidad coleccionable, el primer momento que recuerdo volverme fanática de la ciencia ficción.  Como muchos de mi generación fui educada por la televisión, esa ventana de luz que mostraba "cosas" que de alguna otra forma no hubiéramos podido imaginar. Aunque se leía mucho en casa, la televisión era el entrenamiento que todos compartíamos, cada quien tenía su género predilecto. Mi madre no se perdía las series de suspenso, yo por la edad prefería en su mayoría las caricaturas. Mi abuela era fan de la lucha libres y mi abuelo de las comedias, algo enre

Descripción Detallada

Descripción Detallada – #Escritura2018 5/52 Por Samantha Bañuelos R. | StevieVelvetDog   Él y Ella en el vacío uno frente al otro. Se aproximan para abrazarse y besar sus labios antes de que cualquiera pueda emitir palabra. Siempre les ha intrigado el calor que emana de sus cuerpos, esa condición de calderas humanas invocando la urgencia. Ella se arrodilla ante Él en busca de su miembro, besa la ropa ante de desnudarle, deshaciendo la bragueta y bajando pantalón y calzoncillo hasta los tobillos. Y ahí está como un manjar erecto en espera de ser degustado, frota su rostro y cabello contra él, tratando de impregnarse del olor a masculina piel. Lo toma entre sus manos como un regalo y besa de a poco primero, con cuidado y lentamente hasta sentir que todo Él tiembla; es momento de usar la lengua. Lo introduce a su boca hasta la corona del glande, mientras lame la puntita que empieza a lubricar ofreciendo un sabor a dulce sexo. Ella sabe que Él está mirando, ya que sus ded

Anochecer

De abrazo licántropo y hocico interminable moría el brillo diurno poblado de colmillos y aves de rapiña. Yo por debajo de los párpados, entre texturas inhóspitas deseando ocultar mi piel de la pregunta: ¿sabor de carnada, presa o víctima?. De la nuca a mis pestañas desfilo la penumbra felina, erguida y cuadrúpeda amenaza del insomnio que no termina.